Hace una semana, un domingo como hoy, terminé de trabajar a las 9 de la noche y fuimos a cenar. Yo no estaba muy segura de qué quería comer pero Adam, googleando encontró un lugar de comida griega/mediterránea, abierto hasta las 23hs – algo bastante inusual en Londres – y tras una caminata en la fresca y húmeda noche llegamos…