Hace poco más de un mes y una semana me encontraba de vacaciones en Santa Rosa de Calamuchita, disfrutando del calor estival, la comida casera de mi Mamá, los inigualables asados de mi Papá y de lo más importante: La Familia.
Una de mis últimas noches quise invitar a mi hermana, a mi cuñado y mis bellos sobrinos a comer afuera lo que no se come en casa. Estaba indecisa sobre el menú a atacar ese día, pedí algunas sugerencias y recordé Los Personajes (Av. Giagetto 905, Santa Rosa de Calamuchita, Córdoba), en la Costanera. Mi hermana había escuchado en Cadena 3 – su radio oficial – buenos comentarios sobre este lugar, así que decidimos probar.
Creo, sin lugar a dudas, que uno de los mayores atractivos de este restaurante, es la galería que da al Río Santa Rosa brindando una hermosa postal del mismo, mientras se disfruta de una comida con reminiscencias españolas. Es un gran plus y probablemente el motivo por el cual lo tuve presente.
Entramos a la caso estilo campo, donde abundan los detalles, tales como una antigua máquina de escribir, cuadros por doquier (incluida La Última Cena), un paragüero repleto al pie de la entrada, baúles que funcionan de bodegas, un living room para los comensales/clientes, artesanías varias, en la galería se encuentra de un piano vertical de madera hasta un ropero. Todo está amalgamado para lograr un cálido, rústico y hogareño ambiente sin dejar mucho librado al azar, en lo que a decoración refiere.
La dueña nos preguntó cuantos éramos – 6 – y si teníamos reserva – No -, sólo unos minutos tardaron en darnos una mesa, mientras explorábamos el jardín lateral y trasero cubierto con elegante toldo blanco, reposeras verdes y pseudo-antorchas.
Nos ubicaron afuera, tal como pedimos, nos sentamos y entregaron los menúes con amplias opciones. Para los más pequeños, Sprites y Coca Colas, para los adultos, agua sin gas y elegí un Finca Paca Malbec, que tuvimos que dejar reposar en un balde con agua helada para apreciarlo mejor.
Estábamos todos bastante indecisos respecto a que comer y le pedimos unos minutos más a la moza. Al ratito, sin que mis sobrinas se hayan decidido completamente, la dueña vino a la mesa para tomar las órdenes y elegí el Conejo Asturiano, mi hermana el Lomo, mi hermana para mi cuñado el Matambrito al Queso Azul, mi Ahijado los Ravioles y mis dos sobrinas aún pensando, les pregunté si ya habían decidido y en eso la dueña intervino con el no más simpático de los tonos : «mejor vayamos decidiendo porque el lugar se iba a llenar y la comida iba a demorar porque son platos elaborados», a lo cual, bastante descontenta con su acotación, le respondí que no teníamos apuro. Con toda esa presión encima una de mis sobrinas optó por los ravioles y Nerea por el Carré de Cerdo, sin guarnición, por sugerencia de la dueña.
El clima acompañó la velada. Los platos, si mal no recuerdo, no demoraron tanto tiempo, o con la buena compañía no lo noté. Primero llegó el Carré de Cerdo, que sin guarnición se veía escaso, luego los Ravioles, se veían apetitosos y abundantes, llegó mi Conejo con un ramito de romero que prontamente se vio eyectado al río, luego el Matambrito para mi cuñado que lucía y sabía muy bien y tal vez la mejor de las opciones, el Lomo para mi hermana.
En general debo decir que todo estuvo muy rico, y aunque todos me dijeron que quedaron satisfechos, nunca voy a saber si es verdad… Pero para postres no estaban. Una de las conclusiones de la noche fue que este lugar no se termina de decidir o queda a mitad de camino, porque la ambientación es muy linda y detallada pero por otro lado, en las mesas te dan servilletas de papel… Contrastes.
En el ínterin, la dueña se acercó para preguntarnos si estaba todo bien y si alguien los había recomendado, mi Cuñado dijo que ellos vivían en el pueblo y yo acoté el comentario de la radio. En ese momento de la noche ya estaba más simpática y relajada. A todo esto, el lugar nunca se llenó…
Debería aclarar que no es un restaurante con precios amigables, aunque, después de mi última visita a Argentina, creo que ningún negocio puede permitirse precios amigables.
Pedí la cuenta, en la cual, me llevé la grata sorpresa de que nos descontaron los Ravioles y el Carré. Se agradece. La cuenta fue un total de $620.
Al ir retirándonos, la dueña nos agradeció la visita e invitó a comentar en TripAdvisor… pero yo ya tengo mi Algo Sibarita para ello… 3½ Bracas para Los Personajes. Me gustó el haberme sacado la duda con este lugar… Los invito a hacer lo mismo y me comentan como les fue, Salud!!
Braca